En la terrorífica noche de Halloween no puede faltar la
tradicional calabaza de Halloween.
Si
tienes pensado decorar la casa, nada mejor que empezar con el elemento
decorativo por excelencia… la calabaza, además podrás pasar una tarde divertida
con los peques preparándola.
Es muy fácil! Eso sí, los peques pueden ayudar a
vaciar la calabaza y hacer los ojos y boca, pero de los trabajos con el
cuchillo se ha de encargar un adulto ;D.
Materiales
Calabaza, lápiz,
cuchara, cuchillo, cuchara para helados y una vela.
Pasos
1. Corta la parte superior
con un cuchillo; esta será la tapa de la calabaza.
Al día siguiente la tapa había encogido misteriosamente, así que para evitar que esto ocurra abrir la calabaza por la parte superior inclinando el cuchillo para que el corte sea en diagonal. De este modo, la tapa es más ancha que el agujero y no se caerá dentro.
En nuestro caso como no tuvimos en cuenta esto, tuvimos que improvisar y crear una base con palillos para que sujetaran la tapa.
Al día siguiente la tapa había encogido misteriosamente, así que para evitar que esto ocurra abrir la calabaza por la parte superior inclinando el cuchillo para que el corte sea en diagonal. De este modo, la tapa es más ancha que el agujero y no se caerá dentro.
En nuestro caso como no tuvimos en cuenta esto, tuvimos que improvisar y crear una base con palillos para que sujetaran la tapa.
2. Destapa la calabaza y saca
las pipas y la pulpa del interior con una cuchara. Con una cuchara para helados
limpia bien las paredes, cuanto más fina queden más se iluminará en la
oscuridad.
3. Con un lápiz dibuja
triángulos para los ojos y la nariz y cuadrados o triángulos para la boca.
4. Con un cuchillo de punta corta
las piezas de la cara marcadas.
5. En la tapa también puedes
realizar unos triángulos.
6. Pon una vela en su
interior.
Lista tu terrorífica Calabaza
de Halloween. Boo!!! A divertirnos!
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